El eterno delantero italiano decidió terminar con su carrera profesional como futbolista. Ahora trabajará en las inferiores del Milan.
Feroz, goleador, insaciable. Algunos de los adjetivos para calificar a Filippo Inzaghi, uno de los grandes jugadores que dio el fútbol italiano. A sus 38 años, y tras un par de lesiones que lo marginaron en la última temporada, decidió ponerle punto final a su carrera.
El delantero, que llegó al Milan en 2001, cosechó dos Ligas locales y dos Champions League. Su promedio de gol asusta: en total jugó 630 partidos, y llegó a meter 304 tantos en 21 años como profesional.
Equipos como el Granada, Reading o Watford pretendían incorporarlo, pero el italiano rechazó las ofertas. Ahora trabajará como entrenador en las inferiores del Milan.
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