Le ganaron por 23 a 20, en Córdoba. El conjunto de Phelan le ganó a Italia la semana pasada y sigue con buen ritmo. La revancha, el próximo sábado, en Tucumán.
No convenció en el juego y casi siempre fue superado, pero le sobró presencia y chapa ganadora. Los Pumas sufrieron la mayoría del partido ante Francia pero aún así le ganaron por 23 a 20, en Córdoba, con un equipo repleto de pibes y jugadores nuevos. La revancha será el próximo sábado, en Tucumán. El equipo de Santiago Phelan se mantiene en buena racha, luego de vencer la semana pasada a Italia.
Había una imagen en común que llamaba la atención en el partido: la mayoría de los jugadores argentinos no tenían pelo. Y, salvo por Felipe Contepomi, el resto no fue por casualidad. Se debió a que buena parte de ellos eran debutantes que habían pasado por el terror de la máquina eléctrica, como es común en cada jugador que tiene su primera experiencia. Phelan apostó por un equipo de pibes que respondieron a la altura.
La importancia de mantenerse cerca en el marcador fue clave y de ahí surgió la oportunidad de pasar a ganarlo con un try agónico de Montero, tras una gran intercepción. Habrá revancha ante los Blues el próximo sábado, en Tucumán, con la percepción de que hay equipo y, principalmente, una cultura de ganar. No hay nada mejor que los Pumas que empiezan a tomar rodaje se acostumbren a festejar.
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