Empezó el torneo con chapa de campeón. Recuperó prácticamente al mismo equipo que hace no mucho consiguió la Copa Libertadores. Pero la llama se apagó muy rápido. Estudiantes ya no es el mismo. Hoy perdió ante Atlético Rafaela por 3 a 2 y llegó a los cuatro partidos sin conocer la victoria. La Crema, por su lado, sumó tres puntos vitales en su pelea por no descender.
Se sintió incómodo durante todo el partido. Siempre de atrás estuvo el Pincha, ante un rival concentrado y dispuesto a ganar o ganar en su cancha. Carniello, a los 14 del primer tiempo, abrió el marcador para la Crema y pocos minutos después Fissore estiró la ventaja. Boselli descontó cuando se terminaba la primera parte.
En el segundo tiempo, se exhibieron aún más todas las deficencias del Pincha: no tuvo orden ni juego como para darlo vuelta. Darío Gandín, la figura del partido, puso el partido 3 a 1 con una exquisitez de penal. Y aunque llegó al descuento, gracias a un tanto de Zapata, Estudiantes no tuvo fuerzas para ir a buscarlo, ni siquiera lo pudo meter en un arco.
El Pincha no gana desde la séptima fecha y comienza a preocupar. Su nivel no está acorde al nivel de jugadores que tiene. Rafaela, por otro lado, tiene derecho a ilusionarse. Demostró que está para luchar.
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