A San Lorenzo no le sirvió. All Boys, en cambio, terminó conforme. Claro, el empate sin goles en Floresta dejó sensaciones diferente. El equipo de Ricardo Caruso Lombardi necesitaba ganar porque anteriormente lo habían hecho San Martín de San Juan y Tigre, pero no pudo. Y se complicó un poco más en el promedio.
El Cuervo sigue en zona de Promoción, y ahora Tigre quedó apenas a dos puntos. La zoga del descenso directo aprieta, y el final de la temporada promete ser no apta para cardíacos.
San Lorenzo fue superior en el primer tiempo porque jugó con más decisión de ganarlo, pero le faltó eficacia para convertir alguna de las situaciones claras que tuvo.
El Albo, en cambio, esperó demasiado y no propuso nada. Y entonces jugó muy lejos del arco de Migliore. Encima perdió a dos jugadores por lesión: Emanuel Perea y Agustín Torassa, uno en cada tiempo.
En el complemento el trámite fue parejo, y al equipo de Caruso Lombardi le costó armar jugadas en ataque porque Julio Buffarini, de gran despliegue, estuvo más contenido.
En definitiva, se dedicaron más a pelear y luchar que a jugar. Y el miedo a perder también influyó para que el partido se haya desdibujado tanto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario